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basurilla

Billares húmedos

Billares húmedos Poca cosa que contar.. A ver, llevo dos días sin apenas dormir y ya me gustaría que fuese por una buena fiesta, pero va a ser que no.. Mis obligaciones de estudiante me lo prohíben.. jur jur!! En fin, hoy me voy a pegar una siesta de las que hacen historia...
Hoy tampoco salgo. He decidido que a mi bolsillo anoréxico y pusilánime le convendría ahorrar un poco, especialmente porque la semana que viene me piro a las cartagenas.
Ayer sohreviví al diluvio universal en la capital del Turia. Iba al Ateneo Mercantil a ver a mi papi jugar en uno de sus campeonatos de billar cuando tuve que resguardarme durante casi media hora en el Ayuntamiento, con un frío del carajo. Ya sabéis, cuando el grajo vuela bajo y no veáis en cuestión de treinta minutos los que ví!... Llegué al emblemático edificio valenciano hecha unos zorros, chopada de arriba abajo y totalmente desorientada, aunque llevaba sobredosis de café y estaba de lo más espabilada. Finalmente, un señor muy majo me condujo a la 6º planta, a los billares. Para mi sorpresa, no me aburrí. La verdad es que eso de las carambolas tiene su gracia, pero lo que es tronchante es ver a la peña chasqueando los dedos o dándose palmaditas en la rodilla para aplaudir. Jo con lo que me hubiera gustado aplaudir a saco cada vez que mi padre hacía una carambola. Qué difícil me parece el billar de tres bandas. Le diré a mi patriarca que me enseñe, porque mola 'cantidubidubidú'. El pobre hombre perdió, pero hizo unas carambolas de escándalo, oye. Como dicen, lo importante es participar, oye. Dí que sí. Y además, luego te dan pasta.. lo cual tampoco está nada mal.. casi mejor que el hecho de participar porque sí!!

Besitos soñolientos!!

Listening:The Charlatans. 'Love is the key'

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